Semana 4: World War Hulk

01.03.2011 15:53

Strange estaba ahora frente a Hulk. Hiroim intenta levantarse y "proteger" a Hulk, sin embargo, el poder del demonio que Strange había absorvido era demasiado poderoso. Sin mucho esfuerzo destruyó por completo el brazo izquierdo de Hiroim.

Inmediatamente después de ver a su amigo caer, Elloe y Korg atacan a Strange. Hulk se une al ataque. Strange no hizo mucho esfuerzo para deshacerse de los 3. Golpeó a Hulk lo suficientemente fuerte como para mandarlo lejos, por encima del Madison Square Garden. Hulk cae cerca de una multitud de personas que lo apoyaban. Strange llega al lugar y golpea a Hulk. Una vez que lo tuvo sometido, lo patea salvajemente contra un edificio, causando que se derrumbe.

El edificio se empieza a desmoronar sobre Hulk y los ciudadanos, y fue entonces que Strange se dio cuenta que estaba perdiendo el control. Se apresuró a remover los escombros, solo para darse cuenta que Hulk había protegido a todos.

Strange intentó disculparse, indicando que el poder y la ira eran demasiado dificiles de controlar. Hulk aprovecha que Strange se desconcentró y lo golpea. Una vez que tuvo a Strange contra el suelo lo empezó a golpear salvajemente una y otra vez.

Rick Jones se acerca al lugar y le pide a Hulk que se detenga...

Jones: ¿Qué demonios te ha pasado, grandullón? Ése eras tú. Has salvado a una docena de personas ahi atrás. ¿No? ¿Qué quieres hacer, arruinar tu imagen? Eres una fuerza de la naturaleza...o un...¿cómo te llaman? Un destructor de mundos, ¿no? Ese rollo de los héroes es para tontos. Para los estúpidos y débiles humanos...como Bruce Banner. Ese idiota arriesgó su vida desde el primer día. Me lanzó a una zanja para salvarme de una bomba gamma. ¿Te acuerdas? No sé por qué ibas a actuar como Banner a menos que...ah si, eres Banner.

Hulk solamente lo miraba en silencio. Golpeó una última vez a Strange y le indicó a Miek que le pongan un disco de obediencia a Strange.

De vuelta al Madison Square Garden, ahora convertido en una arena de gladiadores, Hulk hace que Blackbolt, Reed Richards, Tony Stark y Strange se enfrenten contra una bestia salvaje, y luego se enfrenten entre ellos en duelos a muertes, tal y como le había pasado a él en Sakaar. Hulk observaba como cada uno de los que lo habían mandado al espacio cogia su arma para sus respectivos duelos.

Mientras tanto, al Norte de Vermont, el presidente de los EEUU se acercaba en helicóptero al hogar del Sentry. Bob seguía parado en su puerta desde hace ya 29 horas. El presidente se quejaba de tener que hablar con un esquizofrénico agorafóbico como él, y maldecía a Iron Man por no haber logrado convencerlo de que se una a la batalla...sin embargo, en esos precisos instantes, Sentry repasaba en su mente una vez más la conversación que tuvo con Iron Man...

Stark: ¿A qué le tienes miedo, Robert?

Bob: Es la agorafobia. Algunos días es...no puedo...lo siento, Tony. Esto tendrán que solucionarlo ustedes.

Stark: Entendido. Sólo un problema, Robert. Sin ti, perderemos. He analizado el campo de batalla de la luna. Blackbolt lanzó al espacio una roca lunar del tamaño de Rhode Island. Y Hulk sobrevivió. Nunca ha estado tan furioso. Pero eso ya lo sabías, ¿verdad, Robert?

Bob: Contar un oponenta tan poderoso...la cantidad de energía que tendría que consumir...si...pierdo el control, aunque sea un milisegundo...

Stark: A mi también me asusta, Robert. Todos los días escojo entre cursos de acción que podrían afectar a millones, miles de millones de vidas. Con tanto en juego, ¿Cómo me atrevo a decidir? Pero en este momento, no hacer nada es una decisión en sí misma. No importa lo que hagas o lo que no hagas, miles de millones podrían morir. Tienes esa responsabilidad, te guste o no. Sé que no estás preparado para oir esto, Robert. Ninguna persona cuerda lo está. Pero es hora de jugar a ser Dios.

La multitud del estadio gritaba y alentaban a sus favoritos, mientras sus compañeros miraban horrorizados. Strange se enfrentaba a Blackbolt, Strange había intentando defenderse con un hechizo, pero al tener sus manos rotas, la magia no resultó como esperaba y ambos, él y Blackbolt terminaron ardiendo en llamas.

Incluso Korg nuevamente le insistió a Hulk que quizá ya era hora de parar. Al otro lado de la arena, Richards se enfrentaba a Stark. Richards sostenía un garrote, y mientras sus movimientos eran controlados por el disco de obediencia, le rogaba a Tony que se defienda con el escudo que sostenía. Tony se defendía mientras intentaba ganar el tiempo suficiente con el cual, haciendo uso de su extremis, controlar a los guardias robots que había traido Hulk y atacarlos a él y a sus aliados. Lo que Tony no esperaba era que Elloe, obligándolo mediante el disco de obediencia, lo hiciera que dirija los ataques de los guardias hacia Richards.

Richards golpea a Tony y le arrebata su escudo. Tony yacía en el suelo indefenso, mientras Richards levantaba su garrote para conectar un golpe letal. La multitud repetía un solo coro: "¡Mátalo, mátalo!". Richards no quería, pero no había forma de detenerse. Y como en la antigua Roma, le tocaba a Hulk decidir si la víctima moría o vivía. Pulgar arriba, vive. Pulgar abajo, muere. Rick Jones y el resto de los héroes contemplaban todo esto sin poder hacer nada para detenerlos. Hulk levantó su mano...Sentry podía escuchar todo lo que estaba pasando por la TV en la sala de su casa...al mismo instante que Hulk bajaba su pulgar, Sentry emprendía vuelo.

Sentry había decidido que ya era la hora de su intervención.

Sentry: ¿Lo oyes, Bruce? Es hora de jugar a ser Dios.

Concluirá...